¿Cómo mantener una presión adecuada en los neumáticos de su flota?

Descubra algunas buenas prácticas para mantener la presión adecuada de los neumáticos de los vehículos de su flota con el fin de aumentar la seguridad y reducir los costes.

Una presión correcta de los neumáticos es esencial para los gestores de flotas, ya que afecta directamente a la seguridad de los vehículos y los conductores y repercute significativamente en los costes y el rendimiento general de la flota.

  Afortunadamente, existen algunas buenas prácticas que puede poner en práctica para mantener una presión óptima en los neumáticos de los vehículos de su flota, a saber:

Siga las instrucciones de los manuales

En los manuales y la documentación técnica de los fabricantes de vehículos encontrará información sobre la presión correcta de los neumáticos de cada vehículo. Sin embargo, es esencial tener en cuenta que los valores se aplican siempre a los neumáticos fríos, ya que la presión de los neumáticos aumenta a medida que éstos se calientan en la carretera.

Sepa cuándo sus neumáticos están desinflados

Cuando un neumático está insuficientemente inflado, la zona de contacto se expande y una mayor parte de la carga de la rueda se aplica a los bordes exteriores del neumático, lo que hace que el neumático se flexione y se caliente por encima de 150°C. Esto puede provocar un deterioro estructural, la separación de los componentes de la banda de rodaje y del cinturón, un aumento de la resistencia a la rodadura y un mayor consumo de combustible. La esperanza de vida de los neumáticos disminuye en un 15% cuando están deshinchados 0,2 bares y en un 45% cuando están 0,6 bares por debajo de la presión recomendada.

Además, los neumáticos desinflados ya no pueden proporcionar un guiado lateral suficiente y el vehículo responde más lentamente a las órdenes de la dirección, lo que deteriora la conducción en línea recta y las distancias de frenado.

Pero, ¿cuáles son las causas del desinflado de los neumáticos?

Los neumáticos pierden inevitablemente algo de aire debido a la difusión en los flancos y a otros factores como restos en la banda de rodadura, daños en los flancos o incluso una válvula defectuosa por el polvo o la humedad. Asimismo, cuando los neumáticos se someten a cargas pesadas, todas estas variables pueden provocar un inflado insuficiente y el fallo del neumático. Aunque los neumáticos suelen perder una pequeña cantidad de aire al principio, la pérdida de presión se hace notable con el tiempo y puede ser peligrosa.

Realice revisiones periódicas

Mantener todas las capacidades de los neumáticos de su flota sólo es posible mediante comprobaciones periódicas de todos los parámetros relevantes, como el control continuo de la presión de los neumáticos y la inspección visual periódica de los flancos interiores y exteriores de todos los neumáticos del vehículo. Para mantener la presión adecuada de los neumáticos de su flota, compruebe la presión cada dos semanas o, como muy tarde, cada cuatro semanas, recordando los recambios.

Como gestor de flotas, es esencial priorizar la gestión de la presión de los neumáticos como un aspecto crítico de la gestión de flotas. Usando la Integración con ContiPressureCheck™ de Frotcom, el sistema de control de neumáticos (TPMS) de Continental, puede supervisar la presión y la temperatura de cada neumático. Le permite definir los límites de presión y temperatura para cada vehículo, y si Frotcom detecta una situación fuera de los límites, se generará una alerta para el conductor o para cualquier persona de su empresa.

Combinando esta integración de Frotcom con las prácticas que hemos enumerado anteriormente, sin duda optimizará el rendimiento de su flota, mejorará la seguridad del conductor y ahorrará en consumo de combustible y costes de desgaste de los neumáticos.

Frotcom puede ayudarle a controlar la presión de sus neumáticos y evitar costes innecesarios. Para saber más, contacte con un miembro de nuestro equipo.

Fuente:
Continental